Opiniones de La Caperucita y el Lobo. (Restaurante) en Valparaíso (Valparaíso).
La Caperucita y el Lobo
Ferrari 75. Cerro Florida, Valparaíso, Chile
Descripción
Información sobre La Caperucita y el Lobo, Restaurante en Valparaíso (Valparaíso)
Aquí podrás encontrar ubicación, horarios, horas más concurridas, contacto, fotos y opiniones reales hechas por usuarios.
Este sitio tiene una buena puntuación, esto significa que cuidan bien a sus clientes y que hacen todo lo posible para contentar a sus clientes, seguro que vas a tener una buena experiencia
Mapa
Horarios de La Caperucita y el Lobo
Horas más concurridas
Jueves
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Viernes
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Sábado
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Domingo
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Opiniones de La Caperucita y el Lobo
C. C. P.
Una experiencia increíble! La vista es hermosa y la atención muy buena. Los platos y tragos deliciosos. Recomiendo el ceviche como entrada y el filete con humita de fondo 🤩
L. M. G.
Es un excelente restaurante que nos llamo la atención solo por su nombre pero descubrimos una exquisita cocina preocupada por los ingredientes y el detalle. En nuestra opinión es el mejor restaurantes que hemos visitado, los platos son exquisitos y los tragos son únicos, es un lugar que deben visitar si van a Valaparaiso ¡Nosotros volveremos a ir!
V. L. R.
Un restaurante con platos de primer nivel, te sorprende con sus combinaciones de sabores y diseños de platos, los cuales van variando por temporada. Tiene una excelente vista y buena carta de tragos. Los precios son elevados pero vale la pena ir a probar algo distinto para sorprender el paladar
J. A.
Un restaurant precioso, con una carta de temporada increíble. Es por lejos uno de los mejores restaurants de la Región, sino el mejor directamente. Hay que ir con reserva porque es muy cotizado. Tremenda experiencia!
R. P.
Para llegar al restaurant la subida en auto es complicada si es que no eres un porteño autóctono, y si logras subir, arriba no hay mucho dónde estacionar, así que mejor estacionen abajo y suban a pie, es cerca. Les recomiendo reservar ya que no tiene muchas mesas.
La experiencia parte de una forma entretenida ya que hay que subir caminando (jajaj más aún) por un caminito muy bonito (como la mayoría de los cerros no habilitado para sillas de rueda)
Bueno, ya hablando de la comida la verdad es que todo lo que pedimos era bueno. No puedo quejarme de nada.
Partiendo por los tragos de autor, muy recomendables, bien decorados y entretenidos.
Los platos los dividen en actos, primero, segundo y tercero.
Como primer acto pedimos Ostión fresco confitado, pan brioche, espuma de
parmesano, aceite de cilantro y callampas. Y un Baozi (Vegano) que es un dumpling
relleno de ragout de champiñón, caldo de
vegetales asados y sésamo tostado.
Segundo acto. Malaya a la parrilla.
Acompañado de ñoquis de papas, pebre de champiñón
y beurre blanc. Y el otro, Berenjena frita con bechamel de coco, queso vegano casero, ragout de
berenjena, reducción de miso.
Tercer acto. Chocolate
(sin gluten)
Bizcocho de quínoa, mousse de chocolate,
merengue, cremoso de chocolate de leche, nutella
casera, helado de vainilla y café. Y un Sticky Toffee Pudding tibio en salsa Toffee, acompañado de
helado casero de vainilla. Cuando te traen la cuenta te dan dos trocitos de mantecol casero.
No diría que es barato, pero el precio está más que acorde a lo que te llega a la mesa.
La verdad es que este restaurant es buenísimo, se nota mucho trabajo en todo, es delicado, fino, entretenido y con la atención muy buena. Se nota una intención de hacer una cocina diferente. La vista, la música y el hermoso día hicieron de ésta una experiencia sublime.
Volvería? absolutamente, lo amé.
⭐⭐⭐(Vale la pena el viaje sólo por el restaurant)
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P. E. C. L.
Excelente, muy buena atencion
D. S. F.
Buenisima la atención, la comida exquisita y una carta de tragos muy completa con un claro sello de autor.
E. A. O.
Buena comida, con una carta acotada que da cuenta de una preocupación por tener productos frescos. Las porciones son algo pequeñas, pero es una apreciación subjetiva de alguien que siempre está con hambre… La atención fue algo obstructiva, pero se compensó con tiempos muy razonables de espera entre cada plato.
Lo mejor del restorán es la ubicación, en una casa patrimonial bien cuidada con visitas a la ciudad y al mar. El acceso es solo peatonal y hay que llevar zapatos firmes y planos para subir el cerro y las escaleras.
G. V.
¿Por dónde empiezo?
Llegamos sin reserva, sin embargo nos atendieron rapidísimo, desde el minuto uno fueron sumamente cordiales.
Los pancitos que ponen de abreboca son riquísimos, la entrada fue un plato excepcionalmente especial; el plato de fondo, pues ni hablar, DIVINO, y el postre fue la cereza de la experiencia.
Destaco la atención de las garzonas/mesoneras y el ritmo de la atención, precisa y rápida.
Sin duda alguna volvería, se ganaron un espacio en mi corazón y en mi estomago. ❤️
J. P. C.
Exquisita la comida y los tragos. Excelente atención. Muy buen ambiente.